domingo, 11 de octubre de 2015

Tensa calma en el independentismo catalán


La formación independentista CUP, fiel a cuanto anunció en su campaña, insiste en no dar a Artur Mas el soporte que este necesita para ser investido presidente.


El coalición electoral Junts pel Sí (JxS) no encuentra el modo de convencer a su oponente el partido también independentista Candidatura de Unidad Popular (CUP) para que dé soporte a la investidura de su candidato Artur Mas. La izquierda independentista se reafirma en lo dicho en campaña y se niega a darle soporte porque está en desacuerdo con las políticas que ha desarrollado a lo largo de su gobierno y las que piensa seguir llevando a cabo si consigue la presidencia. 

Los medios de comunicación controlados por el gobierno autonómico dan apoyo incondicional al candidato neoliberal porque es quien asegura sus sustanciosos sueldos y libran batallas verbales contra esa troupe “antisistema” que según ellos es la CUP. Razón no les falta para calificarlos de ese modo, pues son la revolución misma, que han comenzado no aceptando ningún sueldo superior a 1.800 €, tres veces el salario mínimo interprofesional, que es de 600 €,  en ninguno de los cargos que ejercen en distintos ayuntamientos. Eso, se mira como se mire ya es una fuerte base de revolución social en un país donde hay alcaldes que cobran más de 4.000 € mensuales.

La CUP dice que dará soporte al candidato que se comprometa a seguir un programa social que priorice el bienestar de la población y la proteja del abuso de los poderes dominantes y se comprometa a seguir una política que cumpla con unos mínimos que ya expusieron en su programa. Eso deja a JxS en libertad para proponer algún candidato, de entre los muchos que integran su larga lista electoral, que pueda ser aceptado por la CUP. Pero ambos contendientes han acordado dejar el tema de la investidura para el último moemtno y seguir negociando en cuanto a las exigencias concretas que CUP pone sobre la mesa para dar soporte al nuevo candidato, que ya han docho bien claro que no podrá ser nadie con un historial como el de Artur Mas.

La ley electoral vigente dice que si en el plazo de dos meses desde el 27S no ha sido investido presidente alguno hay que convocar nuevas elecciones. El despechado aspirante ya ha dicho que antes que renunciar a su candidatura está dispuesto a ir de nuevo a las urnas. Se supone que confía en el hastío de una buena parte de la población votante que la lleve a abstenerse en esa segunda vuelta, con lo cual quizá pudiese obtener un número necesario de escaños como para no necesitar el apoyo de nadie. Habrá que ver si le sale bien, porque ese hombre tiene ya una larga historia de adversidades en sus estrategias electorales.

Mientras el juego sigue en lo más alto de Catalunya, en el entorno político del 27S ha habido un terremoto que amenaza con afectar a las próximas elecciones estatales. La hasta ahora secretaria general de Podemos en Catalunya, Gemma Ubasart, ha presentado su dimisión. Alega disconformidad con el tono y la filosofía de la campaña electoral catalana del 27-S, a lo cual se supone que debe añadirse su discrepancia con el líder del partido, Pablo Iglesias, en cuanto a nacionalismos se refiere. Serio contratiempo para ese partido, ya que contaba con que los buenos resultados en Catalunya lo aupasen en las próximas estatales.

Y mientras acá el pasado 27S sigue acaparando la atención de la gente, en España se llevan a cabo protestas por el impuesto al Sol que el gobierno ha decretado haciendo caso omiso a las muchas protestas de la sociedad; por las maniobras de la OTAN en territorio español; por el atentado de Turquía -que todo hace pensar que ha sido organizado por el mismo gobierno-, y se mantiene la expectación ante las próximas elecciones que se supone harán caer al actual gobierno. Una caída de la que no se espera obtener ningún adelante sustancial puesto que la izquierda parlamentaria anda al modo del viejo dicho castellano: “Como la gente de Pedro León, pocos y mal avenidos”.

Falta una izquierda fuerte en España, en Catalunya, en Europa y en el mundo. Y no porque no haya gente comprometida con ideas claras y acciones valientes sino porque los medios informativos oficiales impiden que se propaguen sus voces. Pero aun así, el rumor de la lucha se propaga y la conciencia del pueblo va en aumento. Esperemos que se desvanezcan las tinieblas antes de que el humo de las bombas que hacen estallar los gobiernos codiciosos oscurezca de nuevo el firmamento. /PC

PUBLICADO EN:

https://ecupres.wordpress.com/2015/10/14/tensa-calma-en-el-independentismo-catalan/

No hay comentarios:

Publicar un comentario